El expurgo es una tarea bibliotecaria que consiste en hacer una evaluación crítica de la colección para seleccionar aquellos ejemplares que se van a retirar.
Los motivos por los que se dan de baja estos ejemplares son el deterioro, el desfase o lo inadecuado de los contenidos respecto a los usuarios a los que van destinados, las necesidades de espacio, la mejora de acceso y la renovación o actualización de los fondos.
Los criterios que se siguen son:
- La fecha del ejemplar (antigüedad)
- La redundancia (multiplicidad del título en uno u otro formato) y su accesibilidad.
- La frecuencia de uso o cuantificación del préstamo en los últimos años.
- El deterioro o estado físico del ejemplar.
- La actualidad del contenido
- El interés demandado por el usuario
- La calidad de la información
Una vez hecha la selección de documentos hay que darlos de baja del programa de gestión de la biblioteca para que no aparezcan en el catálogo.
Después de realizar un expurgo (retirada de los documentos) aumenta la disponibilidad de espacio, se puede reestructurar la distribución del espacio en la biblioteca y se restauran los ejemplares que interesen conservar. Puede darse también la migración a otro soporte (por ejemplo, la digitalización).
Aunque cueste desprenderse de estos fondos, el expurgo contribuye a que la biblioteca tenga una colección viva y renovada, facilita el acceso a la información de sus usuarios y fomenta su uso.
Publicado por el equipo de biblioteca del blog boliteca (Los Boliches).